Después de la pandemia. Cuándo aun estaban empezando a abrir todos los locales y fincas para eventos y bodas y era obligatoria la mascarilla...Juanan y Ana decidieron entregar su amor y unirse en matrimonio, demostrando que el amor no entiende de pandemias ni de miedos. Fue una decisión muy valiente y enriquecedora al mismo tiempo.
Nos tocó trabajar con mascarilla con lo que ello conlleva...Sudores, fatiga y mil cosas más. Pero aun así, nuestro cariño y trabajo fue el motor para inmortalizar el recuerdo más importante para unos novios. El día de su boda.
Hoy Juanan y Ana son un matrimonio espectacular con dos hijos. Seguimos manteniendo el contacto. Una pareja maravillosa.
¡Mil gracias chicos!